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Mejor Album de Música Urbana
Barrio Fino
Daddy Yankee
Mejor Album de Rock Vocal
Mi Sangre
Juanes
Mejor Album de Rock Vocal Dúo o Grupo
Con Todo Respeto
Molotov
Mejor Canción Rock
Nada Valgo Sin Tu Amor
Juanes, songwriter (Juanes)
Mejor Album de Salsa
Valió La Pena
Marc Anthony
Mejor Album de Merengue
Saboréalo
Elvis Crespo
Mejor Album Tropical Contemporáneo
El Rock De Mi Pueblo
Carlos Vives
Mejor Album Tropical Tradicional
¡Ahora Sí!
Cachao
Mejor Canción Tropical
Las Avispas
Juan Luis Guerra, songwriter (Juan Luis Guerra 4 40)
Mejor Album Cantautor
Resucitar
Gian Marco
Mejor Album Ranchero
México En La Piel
Luis Migue
Mejor Album Banda
En vivo
Banda El Recodo De Cruz Lizárraga
Mejor Album Grupero
Loca De Amar
Ana Bárbara
Para El Pueblo
Oscar De La Rosa y La Mafia
Mejor Album Tejano
Polkas, Gritos y Acordeónes
David Lee Garza, Joel Guzman & Sunny Sauceda
Mejor Album Norteño
Diez
Intocable
Mejor Canción Regional Mexicana
Aire
Josué Contreras & Johnny Lee Rosas, songwriters (Intocable
Mejor Album Cristiano (En Español)
Para Ti
Juan Luis Guerra 4 40
Mejor Video Musical (Una Canción Solamente)
Volverte A Ver
Juanes
Gustavo Garzón, video director; Cecilia Sagredo, video producer
Los chistes de la semana
Venía un sacerdote lleno de arroz hasta en los anteojos.
¿Dónde fue la boda, padre?
Que boda ni que demonio, me vomitó un chino.
Va un cura corriendo porque lo persigue un león de repente el cura se arrodilla y dice:
Señor, te pido que este león se vuelva cristiano.
El león se arrodilla y dice:
Señor, bendice estos alimentos que voy a consumir.
Había un grupo de cuarenta monjas que esperaban para confesarse. Pasa la monja número uno, y le dice al sacerdote:
Padre me he reído en misa.
La monja número dos dice lo mismo, y así sucesivamente hasta llegar a la monja número treinta y nuevamente confiesa lo mismo.
Al llegar a la última monja, el sacerdote le dice:
Ya sé hermana, se ha reído en misa.
Y ella le contesta:
¡No padre, yo fui la del pedito!
Una señora va a la iglesia a confesarse y aprovecha de hablar con el cura y le dice:
Padre tengo dos loritas que lo único que dicen es:
¡Somos prostitutas y queremos gozar! Me da una vergüenza cuando van visitas a mi casa y las loras lo único que dicen son esas palabrotas.
El padre le dice:
No se preocupe, tráigame a las dos loras que yo tengo dos loritos los cuales están muy bien educados, rezan y leen la Biblia, lo más probable es que los loros les enseñen cosas buenas.
La señora le dice:
Muy buena idea.
Al otro día llega la señora con las loritas y el cura le dice:
Démelas.
Las metió en la jaula con los loros que estaban rezando y las loras diciendo, somos prostitutas y queremos gozar, en eso se levanta uno de los loros y le dice al hermano:
¡Deja esa Biblia y el rosario que nuestros rezos dieron resultados!
Estaba un hombre caminando por la playa, de repente alzó los ojos al cielo y con toda la devoción que pudo, pidió a Dios que le concediera un deseo. Dios al verlo se apiadó de él.
Pedid y se os dará, exclamó una voz desde lo alto.
Mira Dios, tengo una novia que vive en España, yo vivo en Mallorca y me cuesta mucho ir a verla, ¿No podrías construirme un puente que una las islas con la península?
Eso que me pides, respondió Dios, es un trabajo muy materialista. Tendría que erguir grandes pilares de hormigón que profanarían mis océanos. Debería emplear cientos de toneladas de hierro y asfalto, reflexiona hijo mío, pídeme algo que me honre y glorifique. A lo que el hombre respondió:
Me he divorciado tres veces, me gustaría tener el don de saber escuchar a las mujeres, comprenderlas, saber por qué dicen no cuando quieren decir sí y viceversa, qué quieren decir cuando callan, por qué lloran sin motivos, ¿Cuál es el secreto para hacer feliz a una sola mujer?
Dios desde lo alto carraspeó y respondió a su deseo con una pregunta:
¿Y de cuántos carriles dices que quieres el puentecito?
Estaba el cura dando la misa en la iglesia, y dijo:
En este pueblo se ha perdido la fe.
Y responde un borracho en voz alta:
¡Pues de aquí no sale nadie hasta que aparezca!
Esta era una vez un padrecito que estaba dando un sermón en una cabaña, en eso un comienza a temblar, el padrecito dice:
El ave María.
La gente comienza a rezar, ave María Purísima, el terremoto sigue, entonces el padrecito dice:
El rosario.
Entonces la gente comienza otra vez a rezar, pero en eso mira hacia arriba y ve que unas tablas se van a derrumbar, y dice:
Las tablas.
Y la gente dice:
Uno por uno, uno, uno por dos, dos...

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